La Ira es una emoción mal sana. Cuándo emerge en una situación, normalmente nos está avisando de que nos sentimos en peligro, o abusados en una determinada situación. A veces ni somos conscientes de ella, pero si tenemos la suerte de tomar conciencia de la causa de nuestro enojo, podemos hacer algo, antes de que nos perjudique. Pero cómo veremos al final, para mí, la mejor estrategia, es prevenir los ataques de Ira, a través de la meditación y una higiene de pensamientos positivos que nos alejen de esa emoción destructiva.

¿Qué es el fuego de la ira?
No se si a ti te pasa lo mismo, pero siento que cada vez que estoy enojado o frustrado por algo, una impotencia se apodera de mí y me genera un fuego interno, sobre todo el la zona del pulmón y el corazón. Yo no soy médico o biólogo, pero calculo que tiene que ver con un montón de reacciones que tiene el cuerpo, y que durante la evolución del hombre, sirvieron para prepararse para la situación de luchar o huir de algún peligro para sobrevivir.
¿Sirve de algo el exceso de Ira?
La Ira, nos avisa de algún peligro o de que hay algún problema que nos perjudica allá afuera en el mundo. Pero normalmente, sentimos un exceso de emociones negativas y estrés cuándo sufrimos algún abuso, y es cómo si nos inmovilizaramos mientras somos consumidos por el fuego de la Ira, y entonces sentimos un deseo impulsivo de levantarnos y quejarnos con quién creamos que es el causante de esa injusticia.
Pero normalmente actuamos con un exceso de fuerzas, que termina perjudicándonos a nosotros mismos. Mientras que la situación que nos causo ese cóctel explosivo de emociones queda sin resolver. Así que no, el exceso de Ira no nos ayuda.
¿Cómo podemos evitar la Ira?
Hay dos estrategias que a mi me sirven para evitar la Ira, una antes que esta se manifieste, es decir una estrategia para prevenir esos ataques de Ira; y otra una vez que experimentamos sus efectos, en cuyo caso nuestros grados de libertad para actuar son menores y debemos hacer lo que podamos para sobrellevar nuestro berrinche.
- Estrategia Preventiva. Hay cosas que no podemos solucionar una vez que se presentan. Son frentes de batalla que se abren y nos generan una tensión y temor que nos dejan sin muchas opciones de decisión pro-activa. Pero tener una actitud espiritual, tomar conciencia de nuestra dimensión cómo almas, puntos de luz en el centro de la frente, distintos del cuerpo, y que a su vez, poseen todo el potencial para solucionar los problemas gracias a las virtudes y poderes espirituales que posee, entonces cambiaremos completamente la visión que tenemos con respecto a la vida y a nosotros mismos en relación con ella. Aquí es dónde entraría en acción el hábito de meditar y practicar la conciencia del alma.
- Estrategia Activa (en la situación). Esta también forma parte de la estrategia preventiva, pero viene una vez que la situación se ha producido y sentimos el fuego de la Ira subir por nuestra columna hacia el corazón. Se basa, en permanecer alerta cómo el vigía en época de guerra (cómo decía el Maestro Samael Aun Weor), y volvernos un observador de nuestros pensamientos, palabras y acciones. De esta forma, podremos ver si dejamos de pensar psicológicamente y comenzamos a reaccionar frente a las cuestiones. Producto de esto nos volvemos presa fácil de situaciones, que con una buena estrategia preventiva, de concientización espiritual, nos ayudaría a solucionar de forma mucho más eficiente.
Mi conclusión
En definitiva, se basa en tener una estrategia para la vida, que nos haga poner más el foco en lo positivo de la vida (el vaso medio lleno), que nos ayude a tener paciencia para solucionar las cuestiones a su debido momento, y una vez más que no nos gane el pesimismo. La meditación nos puede ayudar mucho en la estrategia de prevención porque nos hace tomar conciencia de nuestras virtudes y poderes espirituales, y nos hace tomar conciencia que los errores, que cometimos a través de este cuerpo, o en otros cuerpos anteriormente, no forman parte de la esencia original y eterna del alma, y que con la conexión con el Padre (Raja Yoga), nos podemos liberar de las cadenas de lo que cometimos en el pasado porque desconocíamos esta información y no teníamos al Padre.