Durante el día puedo ganar minutos e incluso segundos de meditación donde dirijo mis pensamientos hacia el interior. En estos momentos puedo concentrarme en que soy un alma y así me desapego del cuerpo y las situaciones. Lo ideal sería verme como un depositario del cuerpo, mente y riqueza que Dios me dio para que sirva a mis hermanos. Como resultado mi vida se vuelve feliz y pacífica.

Encontrar momentos donde puedo estar cara a cara con Dios
Durante el día hay momentos donde pienso “¿Qué hago acá?” O tiempos muertos donde estoy libre temporalmente, en vez de sacar el celular y divertirme con la última selfie de Bailando por un Sueño, puedo generar un ingreso espiritual meditando.
Aquí te dejo una práctica de meditación para el día.
Recuerda que el ahorro es la base de la riqueza, y espiritualmente el ahorro de tiempos muertos transcurridos en meditación, al final del día redundan en un gran beneficio para el alma. Recuerda que lo que atrae la mente en algún punto influirá también el corazón y nosotros queremos la paz.
Cuando alguna situación me hace ruido recordar automaticamente que soy un alma
A veces vemos cosas que no nos gustan o si estamos familiarizados con la visión espiritual, comprendemos que así no es como se hacen las cosas, en estos casos en vez de criticar puedo pensar que yo soy un alma, y que el otro también es un alma. De esta forma me desapego de la crítica porque veo a la otra persona con misericordia ya que todavía no despertó a la conciencia del alma.
Una vez que realicé esto veo cómo pensar (transmtir vibraciones de paz), decir o hacer algo para ser una influencia positiva en esa persona. Con esta práctica permanezco en paz y me ahorro un montón de pensamientos inútiles.
Aprovechar los momentos tempranos de la mañana
A veces nos vamos a dormir tarde, justo en los momentos donde comienza el momento más estable del día en la mente para la meditación (a eso de las 2 o 3 am). En estos momentos la mayoría de las personas están durmiendo, por lo cual se puede lograr una meditación sumamente profunda sin influencia de vibraciones externas.
Si alguna vez tengo tiempo o me desvelo meditar será una forma de ir a dormir con un estado poderoso y espiritual que me ayudará a prepararme para las tareas diarias. También otra opción es ir a dormir temprano, a eso de las 9 o 10 pm y levantarme a las 3.30 am pasar empezar el día con este período de meditación poderosa.
En este tiempo especial Dios mismo nos levanta con su amor y nos atrae hacia Él. Toca nuestro corazón y nos prepara afrontar el día. Meditar en este tiempo nos garantiza que tendremos la compañía de Dios durante todo el día. Atravesaremos situaciones complejas y casi no nos daremos cuenta.
Cerrar las actividades del día con un rato de meditación
Cerrar las actividades del día con la experiencia del silencio (sino puedo tomarme unos minutos a solas, por lo menos meditar mientras vuelvo a casa) me ayuda a cerrar también el día mentalmente. Lo que no se pudo resolver hoy ya podré hacerlo mañana. No es necesario llevarme el trabajo a casa.
El momento especial a la tarde es de 19 a 19.30. En ese tiempo se medita (a las 19 de cada país de lunes a lunes), en los Centros de Brahma Kumaris alrededor del mundo. El buscador está en inglés, pero entiende tu busqueda ya sea por País, Estado o Ciudad. Puedes acercarte a algún centro que te quede cerca para meditar en grupo, otra experiencia que aumenta el poder de la meditación.
Aquí te dejo un video con una meditación para cerrar el día.
Comer en silencio
Una vez que llegue a casa y prepare la cena (o durante las otras comidas diarias), tener una actitud silencio (puedo comer en familia y tener silencio mental), lo cual no solo hará que la comida me caiga bien, sino que también me alimentará mental y espiritualmente.
La comida es una parte muy importante del esfuerzo por tener una mente más estable y pacífica. Tengo que comer en paz y en lo posible recordando a Dios.
Te dejo un link a un taller de cocina vegetariana y conciencia a cargo de Amalia Britos, profesora de Raja Yoga y coordinadora de la sede nacional de Brahma Kumaris Argentina.
Un comentario en «La meditación en la vida cotidiana»