Estaba en la cama dando vuelta una y otra vez en mi mente una película de lo que había pasado las 4 últimas horas. Finalmente me di cuenta de que a medida que iba resolviendo en mi cabeza el tema, los recuerdos se desbloqueaban y comenzaba a tener recuerdos de mayor alcance que las últimas 4 horas.
Pero para lograr esto puse un punto final a mis pensamientos y comencé a meditar. En este post te muestro exactamente lo que hice y como me ayudó.

¿Cómo lo podría hacer solucionado de otra forma?
En más de una oportunidad mientras los recuerdos giraban una y otra vez sobre mi cabeza estuve tentado de levantarme y ponerme a realizar mis actividades.
Pero llegué a la conclusión de que si lo hacía mi cabeza iba a seguir acumulando elementos extraños y que me iba a alejar cada vez más de la esencia. Y la verdad es que no tengo que darle el gusto a la mente de ponerme a trabajar para que se calme.
Porque dicho sea de paso, estaba durmiendo la siesta, y no me gusta perder mi siesta del sábado.
Entonces me puse a meditar.
¿Y cómo hice?
Puse un punto final a los pensamientos inútiles y comencé a recordar que soy un alma, y me daba el "lujo" de vivir cada pensamiento en mi cabeza como si fuera el último.
Entonces decía: "soy un alma"... "soy un punto de luz incorporal"... y así seguía pensando en El Padre: "Estoy frente Al Padre del alma"... "me siento atraído como una aguja hacia un imán"... "a medida que me acerco reconozco a mi Padre"...
En todo momento, si me intentaban volver a asaltar los recuerdos que no me dejaban conectarme con mi esencia, los dejaba pasar, y seguía conectándome con la paz.
Aquí te dejo un comentario de meditación que te puede ayudar a concentrarte como me pasó a mí, si sientes que tu mente se volvió indomable.
Recuerda: luego irás a resolver aquello por lo que tu mente gira una y otra vez, pero irás con poder espiritual.
Te pido que lo compartas si algún amigo te comentó que no puede dominar los pensamientos.