INCANSABILIDAD se logra cuando permanezco cerca de Dios el Padre y no me dejo engañar por la ilusión de que soy un cuerpo. Las gratificaciones que puedo obtener con la conciencia de cuerpo son como una pizca de sal en un saco de arena. Y se esfuman tarde o temprano. La INCANSABILIDAD es producto del contentamiento y la determinación.

INCANSABILIDAD es lo que mantengo cuando comprendo que Dios vino a rescatarme de este océano de veneno en que estamos viviendo y me lleva al océano de felicidad. El se compromete a darme una vida de auto soberanía y verdad. Sin importar los cataclismos climáticos o económicos que estén afectando al mundo. Sólo puedo conocerme, y ser el dueño de mi mismo cuando hay pureza, es decir que mi comportamiento se transforma de acuerdo a la verdad revelada por El Padre.

La VERDAD es un poder que me capacita a hacer mi vida valiosa como un diamante. INCANSABILIDAD es un producto de sentir respeto por todos y todo, porque comprendo que todas las cosas tienen su valor inherente, y que todo lo que ocurre sobre el escenario de la vida es como tiene que suceder. Sin importar lo malo que pase, todo tiene un porque, pero no es necesario romperse la cabeza tratando de entender la realidad con nuestra mente.

Solo tenemos que volvernos parte de la solución. Sólo realizar nuestro papel lo mejor que podamos, con integridad y de esta forma, la parte de la realidad que tenga que sernos revelada para que permanezcamos felices y contentos se nos revelará y de esta forma haré a los demás felices y contentos. Entonces paulatinamente vamos comprendiendo más de esta verdad en la medida que conquistamos la conciencia de cuerpo. Es lo que en la mitología india se llama girar el disco de la autorrealización.